¡Ya era hora! He tardado más de lo previsto, pero aquí tenéis algunas curiosidades relacionadas con «33 Razones para volver a verte», tal como en su día hice con «Llévame a cualquier lugar». Ha sido bonito volver a recordar su historia, sus detalles, y espero que os guste la idea, porque tengo en mente que, tanto esta sección como la de «Hablando de…», se convierta en una costumbre para cada novela.
2. Desde mi perspectiva de autora, Rachel siempre fue la verdadera protagonista de esta historia, desde el principio hasta el final. Por eso, aunque toda la novela está narrada en tercera persona, quise darle a ella voz en el epílogo. No sé, pensé que tenía que ser así, de ahí que esté en primera persona del presente. Y esto se repite también en las siguientes entregas que siguen la misma estructura.
3. ¡Me chiflan las historias sobre segundas oportunidades! Por eso decidí llamar a la serie «Volver a ti», porque en las tres hay un reencuentro. Además, a pesar de que en su día no fue algo muy meditado, esos capítulos iniciales en los que van pasando los años dan mucho juego y es una de las cosas que más me gustan a la hora de escribir estas novelas.
4. Sé que no tiene mucho sentido, pero ponerle nombres de alimentos a los animales me hace mucha gracia. Sí, es una cosa muy tonta. Ya lo hice con «Cereza», el hámster que tuvieron los protagonistas de «Otra vez tú», y aquí repito con «Mantequilla», el gato de Rachel. La última fue con «Tal vez tú» y la mascota de la protagonista, «Regaliz».
5. El libro está lleno de guiños. Uno de ellos es que aparecen Daniel y Babia en diferentes momentos de la historia y, por si no lo sabéis, son los personajes de Cómeme si te atreves. Además, en esa novela, como curiosidad, también tenéis un cameo de Léane, la protagonista de «Llévame a cualquier lugar», que quiso darse una vuelta por España…
6. Vuelvo a salir en la historia, sí. «Alice Kellen» ya decidió en «Llévame a cualquier lugar» hacer un viaje relámpago a Reading y ser una de las juezas del concurso de periodismo. ¿Qué puedo decir? Me encanta la idea de pasearme por mis novelas (es una tontería, lo sé).
7. Y hablando de apariciones, quizá la más especial sea la de Emma Sowerd. No muchos os distéis cuenta, pero la editora de Rachel vive en Los Ángeles, está un poco loca y, sí, es la protagonista de «Otra vez tú».
8. Como sabéis, Rachel es escritora y está inmersa en una trilogía. Pues bien, llegué a imaginarme también la historia de Agatha y Fred, los protagonistas de mi protagonista (qué redundante suena todo). Esto me hizo pensar en la cantidad de cosas que un autor sabe de su historia aunque, lógicamente, termine plasmando una parte muy pequeña y concreta.
9. Como soy muy fan de Breaking Bad, decidí hacer un pequeño homenaje, de ahí el apellido «Cranston» y que un tal Jessie Pickman salga por ahí (ejem, ejem).
10. ¿Ese momento en el que Mike está tomándose una copa con Luke en un local y se queja de lo «ridículamente profundo» que es que una chica se pinte las uñas de un color distinto según su estado de ánimo? Sí, es Mike burlándose de Léane, la protagonista de «Llévame a cualquier lugar».
11. San Francisco me gusta muchísimo. Quizá por los contrastes, el mar, sus calles empinadas, el famoso tranvía, el puerto… Todos los barrios y sitios que aparecen en la historia existen y, ahora que voy conociéndola un poco mejor, tengo ganas de volver a repetir.
12. Tanto esta novela como las dos siguientes que he escrito, se podrían catalogar dentro del «New Adult», pero todas comprenden edades que van desde los veintitrés a los veintiséis años, justo cuando la etapa universitaria queda atrás, y creo que es un momento muy interesante, con más responsabilidades y la presión que supone decidir qué rumbo tomar.
13. Rachel y Mike son dos personajes complejos, con muchas inseguridades, luces y sombras. Sé que no todo el mundo empatizará con ellos, pero para mí han sido muy especiales; quizá porque fueron los primeros, los que abrieron la serie y, al estar de algún modo presentes, aún no me he despedido de ellos.
14. Aunque por alguna (rara) razón mi «niño mimado» es Luke. Tan perdido, tan alocado, tan tierno a veces, tan… ¡pronto lo conoceréis mejor!
15. Me encanta la portada de «33 Razones para volver a verte». De todas mis novelas, es sin duda mi preferida. Me parece nostálgica, bonita y sencilla.
16. En su día, cuando terminé de escribir esta novela (que parece que no, pero desde el 2014 ha llovido mucho), pensé en hacer una historia en la que Jimena fuese la protagonista, pero luego terminé descartando la idea.
17. El padre de Rachel se llama «Robin» porque mientras escribía en el comedor tenía la televisión encendida y de pronto anunciaron la muerte de Robin Williams. Recuerdo que me dio mucha pena. Cuando bajé la cabeza y volví a teclear, me salió solo llamarlo así. Oh Captain! My captain!
18. Es con diferencia la novela que más he reescrito a la hora de reforzar escenas o cambiar detalles. De hecho, en su versión inicial, tenía un final totalmente distinto (lo que no cambiaba era el epílogo). Sin embargo, nunca me llegué a sentir totalmente satisfecha, porque no soy una autora que suela meter acción o «cosas inesperadas», no es lo mío. Así que decidí hacer un final alternativo.
19. Y lo mismo ocurrió con las edades. Cuando escribí esta historia, los protagonistas tenían veintisiete años. Iba a ser una novela RA; sin embargo, varias personas me comentaron que el tono era muy New Adult y al final se decidió que lo mejor era bajarles un poco la edad porque, además, conforme se sucediesen las siguientes entregas de la serie, se iría mucho. Para que os hagáis una idea, Luke en su historia tiene 25 años y Jason protagonizará la suya con 26 (¡cómo pasan los años para esta gente imaginaria!).
20. No recuerdo cómo surgió lo de que Mike contase cosas para relajarse, pero es una de las cosas que recuerdo con más cariño de esta novela. Eso y las pecas de Rachel. Un detallito tonto, pero tan íntimo, tan personal entre ellos dos…
21. También sonrío cada vez que alguien se refiere a Rachel como «la pecosa». Me gustaba la idea de que solo Mike la llamase así, que ese mote cariñoso se diese solo con él. Ah, y me encanta desde que escuché por primera vez que Sawyer llamaba así a Kate en Perdidos, una de mis series preferidas. No sé por qué, hace mil años que la vi, pero se me quedó ese detalle.
22. «Nirvana» es uno de esos grupos que suelo escuchar mientras escribo y hay algo en su música y en la voz rota que me recordaba mucho a Mike. Desde el principio asocié este grupo a él. Y «Queen» estuvo ligado a Robin.
23. La otra canción que marca la historia es sin duda Wonderwall, de Oasis. Hay una escena en la que Mike se la canta a Rachel mientras conduce hacia Fisherman's Wharf. Y es que pensé que la letra era muy… ellos: «Hay tantas cosas que me gustaría decirte, pero no sé cómo, porque quizá vas a ser la única que me salve y, después de todo, tú eres mi maravilla».
24. Pero también hay muchas más canciones que escuché mientras escribía su historia y que me recuerdan a ellos, como Year of the cat, A sky full of stars, Transatlanticism, Who wants to live forever, Undisclosed desires, Volverá…
25. Si tuviera que elegir un capítulo de la novela, me quedaría con el 16. Creo que ese momento marca un antes y un después en la relación entre ellos; empieza a abrirse la posibilidad de recuperar esa amistad que tenían y me gustó mucho escribirlo, no sé, tengo el recuerdo de haberlo disfrutado, de que los diálogos fluían solos...
26. Los «musos» de esta historia son Jensen Ackles y Emma Stone. Siempre lo digo, pero es algo aproximado a lo que imagino. Nunca he conseguido encontrar en la vida real a los protagonistas tal como los veo en mi cabeza, pero suelo dejarme llevar por los gestos y una imagen general, aunque luego les cambie rasgos físicos. Para una idea más visual de la novela, tenéis su tablero de Pinterest.
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